🗨 7/10
Pais: Argentina (colabora España)
Año: 2019
2001, Argentina. Fermín Perlassi (Ricardo Darin) y su mujer Lidia Perlassi (Verónica Llinás) tienen un hijo, Rodrigo (Chino Darin) estudiando en la capital. Ellos son un matrimonio que tras más de veinte años se siguen queriendo con pasión y cordura, son el sostén el uno del otro y sueñan con tener una vida mejor juntos, siempre juntos, no pueden imaginar un mañana sin el otro. Lidia es la que crea los planes y Fermín se deja llevar por su emoción y así es como ambos dan vida a un sueño que no sólo les dará futuro a ellos sino también a todo el pueblo, quieren comprar una antigua fábrica a modo de cooperativa agrícola y así todo el pueblo pone su pequeño o grande granito de arena, desde aquel que vive en un lodazal con su montón de hijos, el orgulloso de la tienda, su mejor amigo el mecánico, la dueña de la fábrica más importante del pueblo, etc. Pero necesitan la mitad de la suma y el Banco accede a concederles el crédito si ingresan ya mismo el dinero.
De este modo, donde ellos creían que sería el lugar seguro, el gobierno arruina sus sueños dando luz verde al banco para hacer el "corralito". Ellos no pueden disponer de su plata, de la que les ha costado tanto trabajo, sudor, y lágrimas. Pero no sólo eso, sino que en un accidente de coche, Lidia muere y Fermín no puede superarlo. Rodrigo vuelve para ver por última vez a su madre, consolando a su padre y buscando el consuelo en él. Los dos pasan el siguiente año viviendo juntos y levantándose por empeño de Rodrigo. Cuando el mecánico Belaunde (Daniel Araoz) se entera de que la plata de todos la tiene escondida Fortunato Manzi (Andrés Parra), todos los giles (aquellas personas trabajadoras, buenas, ilusas y algo incautas), deciden recuperar lo que es suyo e ingenian un plan peligroso (y divertido).
Esta es la primera vez que Ricardo Darín y su hijo, Chino Darín, trabajan juntos en una película. La dirige Sebastián Borensztein y se basa en la novela ganadora del premio Alfaguara 2016 "La Noche de la Usina" de Eduardo Sacheri.
En palabras de Ricardo Darin: “Estamos tan domesticados, tan acostumbrados a obedecer y a seguir la corriente de una sociedad de consumo, que a veces olvidamos cuales son nuestros derechos. Nunca hay que bajar la guardia en la defensa de los derechos. Siempre están al acecho los buitres que se aprovechan de la gente incauta, confiada y decente. Esa gente que trabaja y que hacen que el mundo se mueva”.
Escuché hablar de La odisea de los Giles unos días de que se estrenara, era el debut juntos de Ricardo Darin y su hijo Chino Darin. Sabéis que me encanta Ricardo Darin, es un actorazo argentino maravilloso, mi cariño por él empezó a los 14 o 15 años pues tenía una amiga de ese país que me lo dió a conocer. A su hijo, Chino Darin lo conocí el año pasado como el inspector enamorado de Vera, el personaje de Adriana Ugarte en Durante la tormenta y me enamoré perdidamente de él.
Así que, yo estaba muy emocionada por verlos juntos, pero no tanto por la trama, que en realidad es muy buena y se inspira en los hechos reales que atravesaron los argentinos en 2001 con el corralito. Me encanta cuando se hacen películas sociales donde nos recuerdan que existimos muchas personas buenas en el mundo, y como las películas y las historias que cuentan pueden ser una lucha y una defensa social. Creo que nadie debería perdérsela.
La odisea de los Giles la vi con mis padres y mi hermano en el cine, es una película que merece la pena ver porque es una de esas historias que hablan de lo que más importa, que no es exactamente el dinero, sino de la lucha, los valores, y los sueños, de que los bancos, los poderosos y los adinerados no nos tomen el pelo, de que no dejemos nunca que nos venzan, porque siempre se puede volver a empezar. Creo que la emoción estrella de La odisea de los Giles es el duelo, el duelo por perder a una persona amada, el duelo por perder un sueño, el duelo por perder la razón de vivir. Y por supuesto, la otra emoción estrella es la lucha, que se alimenta del amor propio y de la esperanza, esta lucha conlleva salir de ese sentimiento tan absorbente de duelo y ponerse en pie, es la odisea en si misma.
Seré sincera, esperaba muy poco de esta película, pero me atrapó dentro de la historia, me llevó a vivirla con unos personajes a los que más pronto que tarde les tomé cariño, me hizo moverme al ritmo de sus mismos sentimientos: ilusión, amor, compañía, pérdida, rabia, dolor, desaliento, esperanza, tiempo, silencios que se llenan con cariño, motivación, disfrute, justicia que no venganza, risas, victoria. Y una película que es capaz de hacerte transitar todas esas emociones tan valiosas de la mano de la vida de los personajes es una película maravillosa, por no hablar de ese acento y ese dialecto argentino que tanto enriquece la historia, de esos hermanos quizás no de sangre pero si de ideales y sentimientos.
Me encantó La odisea de los Giles, me llevó a vivir con ellos como se siente cuando un país, un banco, que debe proteger los frutos del trabajo duro de sus ciudadanos, sega todas sus esperanzas y derechos, y para más rabia, entrega ese dinero que no le pertenecía a un tipo rico y malvado. Pues esa primaria necesidad de venganza tras la desilusión y la apatía es normal, pero lo que me encanta de estos giles es que esa venganza la convierten en justicia, porque ellos únicamente recuperarán con astucia lo que es suyo. Y es así como un drama también nos devuelve las risas que habíamos olvidado, pues la segunda mitad de la película es motivadora y divertida.
Todos los personajes son importantes, uno no destaca más que otro, Con Fermín están sus amigos y compañeros, las personas con las que lleva toda la vida, y que no van a permitir que les roben y les hundan la vida y el futuro.
Fermín y Rodrigo son mis favoritos. Amé muchísimo el contraste de las personalidades de padre e hijo pero también lo muchísimo que se querían y como estaban peleando juntos por superar el duelo, porque ellos siempre van a añorar y necesitar a Lidia pero se tienen el uno al otro, y ese vínculo padre e hijo me conmovió muchísimo, por supuesto, ese amor era real, pero dentro de pantalla también.
Rodrigo tiene una amistad muy divertida con la secretaria de Manzi, pero también había química entre ellos y sabía que en algún momento acabarían juntos.
🗨 6/10
Pais: Estados Unidos / Canadá
Año: 2019
Roy Courtnay (Ian McKellen) en realidad no se llama Roy, es uno más de los múltiples nombres que ha tenido a lo largo de su complicada, amoral y violenta vida. ¿Roy es inglés, alemán, ruso? ¿Desde que posición vivió la segunda guerra mundial y lo que quedó de Berlín tras el final de esta? ¿Que pecados esconde su juventud, su adultez o su senectud? Roy no pretenderá que nos enteremos y mucho menos querrá que lo sepa Betty pero la verdad, aunque esté enterrada por muchos siglos, sale a la luz. Roy se dedica a cambiar su identidad y a estafar a caballeros y damas. Entre las damas resuena fuertemente la tentación de estafar a Betty McLeish (Helen Mirren), quien es una mujer millonaria que aparentemente se traga todas las mentiras de Roy.
Pero Betty es mucho más de lo que parece, no es sólo una bondadosa y encantadora mujer que ha sobrevivido frente al dolor más grande de su vida, es alguien que lo perdió todo y tuvo que reconstruirse a si misma. Betty no es una tonta ilusa, pero lo parece. Roy le debe algo a Betty, algo perdido en la memoria y en la sangre. Betty apostará todo para enredar en esta gran mentira a Roy, pero ¿que siente por Roy? ¿De verdad quiere recorrer Europa con él o sólo busca encontrar la paz que por tanto tiempo se le ha negado?
La gran mentira es una película que tenía muchísimas ganas de ver porque vi dos veces el trailer en el cine y me emocionaba un montón (aunque el trailer nos engaña y nos hace pensar que podría tener amor y NO). Sabéis que debido a mi fobia social + depresión prácticamente no he salido a la calle en estos meses, pero con esta película, animada por mis padres, nos fuimos a verla, y nos sorprendió y embargó la intensa y durísima historia que vimos. A primera vista parece la típica película sobre estafas y no, esconde mucho más que eso, una historia que se remonta más de 50 años atrás, una deuda de justicia y dolor.
Me gusta mucho cómo esta película y Roy, Betty, y su sobrino gay juegan con el espectador a la vez que juegan unos con otros. Después de todo es una película de suspense y sabe muy bien como jugar sus cartas, como mostrarnos las luces y sombras de los personajes, como confundirnos y dar giros espectaculares. Es muy difícil hablar de esta película porque muy fácilmente se puede caer en el spoiler, pero la historia de La gran mentira se va desenredando entre pistas y juegos bien hechos.
Es una buena película, que no me enamoró o algo así como yo esperaba pero me pareció buena, sobre todo porque se apoya en dos actores que mueven muy bien sus cartas, y que hacen de su historia algo impactante y abrumador. Todo el tiempo nos preguntamos quién es Roy y quién es Betty, porque realmente no puede ser tan simple, y así es, ninguno de quien nos ha dicho ser, y lo que ambos viven juntos en su vejez no es ninguna historia de amor, si de estafa, para más que eso, es el pago de una deuda impagable.
Roy es uno de los personajes más asquerosos que he conocido nunca, cuanto más le conocemos más me horrorizaba su falta de moral, su violencia y hasta donde es capaz de llegar, de humillar, de vejar a otros seres humanos para salirse con la suya. En su piel no hay ni un sólo día de arrepentimiento y eso que en él se acumulan muchos pecados. Pero ahí está Betty para hacer un poco de justicia, Betty sufrió mucho cómo desencadenante de este hijo de puta, se me encogió el corazón ante el dolor que él le causó, Betty es un amor de persona, tanto si finge como sino, pero también es una mujer que se ha levantado sobre su propio dolor.
Helen Mirren e Ian McKellen están maravillosos en sus papeles, no puedo más que aplaudirles, y no puedo olvidarme también a todos los que les acompañan y a los que les interpretan en la juventud.
Me gusta mucho cómo esta película y Roy, Betty, y su sobrino gay juegan con el espectador a la vez que juegan unos con otros. Después de todo es una película de suspense y sabe muy bien como jugar sus cartas, como mostrarnos las luces y sombras de los personajes, como confundirnos y dar giros espectaculares. Es muy difícil hablar de esta película porque muy fácilmente se puede caer en el spoiler, pero la historia de La gran mentira se va desenredando entre pistas y juegos bien hechos.
Es una buena película, que no me enamoró o algo así como yo esperaba pero me pareció buena, sobre todo porque se apoya en dos actores que mueven muy bien sus cartas, y que hacen de su historia algo impactante y abrumador. Todo el tiempo nos preguntamos quién es Roy y quién es Betty, porque realmente no puede ser tan simple, y así es, ninguno de quien nos ha dicho ser, y lo que ambos viven juntos en su vejez no es ninguna historia de amor, si de estafa, para más que eso, es el pago de una deuda impagable.
Roy es uno de los personajes más asquerosos que he conocido nunca, cuanto más le conocemos más me horrorizaba su falta de moral, su violencia y hasta donde es capaz de llegar, de humillar, de vejar a otros seres humanos para salirse con la suya. En su piel no hay ni un sólo día de arrepentimiento y eso que en él se acumulan muchos pecados. Pero ahí está Betty para hacer un poco de justicia, Betty sufrió mucho cómo desencadenante de este hijo de puta, se me encogió el corazón ante el dolor que él le causó, Betty es un amor de persona, tanto si finge como sino, pero también es una mujer que se ha levantado sobre su propio dolor.
Helen Mirren e Ian McKellen están maravillosos en sus papeles, no puedo más que aplaudirles, y no puedo olvidarme también a todos los que les acompañan y a los que les interpretan en la juventud.
Pais: Reino Unido
Año: 2016
Nueva York, años cincuenta. Therese Belivet (Rooney Mara) es una joven dulce, reservada y encantadora que trabaja en una prestigiosa juguetería de la ciudad. Therese tiene un sueño en el que no creé demasiado pero que ama, la fotografía. A veces se desvela queriendo escapar con su cámara y una pequeña maleta pero nunca se atreve y tampoco puede permitírselo. Tiene un novio, Richard (Jake Lacy) del que no está enamorada, y ni ella misma entiende porqué no da por terminada la relación.
Un amigo de Richard le ofrece un trabajo en un periódico, pero a Therese la asusta aceptar el empleo, teme que de ese modo se conforme con ser una secretaria y deje de fantasear con su sueño. El día de Navidad, entra en su anodina y melancólica vida Carol Aird (Cate Blanchett), y Therese queda abrumadísima por su presencia, como si hubiera entrado en un sueño o en un cuento.
Therese es fuerte, valiente, elegante, con mucho carisma y unos ojos que gritan pidiendo amor, al igual que los suyos. La sencilla conversación que mantienen las seduce y ambas buscan excusas para volver a verse, esta vez a las afueras de la ciudad, en casa de Carol.
Carol recoge a Therese y conoce a Richard, que desde el primer instante reconoce en ella una rival. ¿Richard sabía algo de la sexualidad de Therese que ella no sabía? Es verdad que en la vida, a Therese y Carol no sólo las separa el estatus social, también lo hace la enorme diferencia de edad, la experiencia vital de Carol y la identidad: mientras Carol ha encontrado la suya, Therese todavía no ha explorado la suya. Pero hay algo más poderoso que cualquiera de esos elementos que podrían separarlas si no fueran Therese y Carol, ese sentimiento de vínculo, unión, deseo, curiosidad, amor.
Las dos saben desde el primer instante que su relación no es una amistad. Es un flechazo. Es un romance. Pero no sólo la sociedad está en contra, el todavía marido de Carol también lo está. Harge Aird (Kyle Chandler) está en pleno proceso pacífico de divorcio, sin olvidar que tienen una hija en común, pero cuando Harge descubre a Therese en su casa en esa primera cita, en la que ninguna de las dos se había atrevido a desdibujar las fronteras y sacar a la luz los sentimientos, Harge entra en cólera y decide que le quitará a la niña.
Therese buscará ayuda en Abby (Sarah Paulson) su amiga de toda la vida y ex amante, mientras no podrá evitar embarcarse en las hermosa de las aventuras con Therese, con el miedo también a perder a su preciosa hija. ¿Una mujer no tiene derecho a ser quién es?
Película dirigida por Todd Haynes y Basada en "Carol" de Patricia Highsmith.
No he visto muchas películas donde dos mujeres se enamoren, quiero empezar por ahí, porque realmente son historias que deberían ser como cualquier otra pero que tienen menos visibilidad, y seguro que a esta le ayudó mucho tener detrás a Rooney Mara y Cate Blanchett porque son actrices populares, visibles y espectaculares.
Realmente deseaba enamorarme de esta película y por eso no la vi inmediatamente cuando Amazon la subió a Prime Video, es estúpido pero a veces me pasa que tardo mucho en ver algo que realmente deseo por si me decepciona. Y efectivamente me decepcionó pero también me gustó.
Carol la vi con mi madre en la televisión, claro, porque ella también está abierta a ver películas que aplauden el amor sin importar el género, vamos, sin importar la sexualidad. Carol nos habla sobre la homosexualidad y la bisexualidad, pero realmente nunca nos aclara si a Carol y Therese alguna vez les gustaron sus novios/esposos, o si los utilizaron o se acomodaron con ellos, también no olvidemos que en 1950, Nueva York no aplaudía a las mujeres que luchaban por lo que querían, menos a las que amaban a otra mujer, pero para mí esta película tiene vacíos que tendrían que haber llenado.
Es una historia dulce, melancólica y entrañable, que se asienta más en las vivencias y miradas que en los diálogos y pensamientos. Creo que me esperaba una historia de amor con mucha intimidad emocional, con un montón de confesiones de Therese a Carol y de Carol a Therese, y no es así. Me extrañó mucho esa falta de diálogos entre ambas, se enamoran en solo una navidad pero sólo se viven la una a la otra y no desatan todos sus recuerdos para la otra. Mi sensación es que conocieron quien era la otra ahora y quién aspiraban a ser, pero el pasado lo dejaron en ascuas, e incluso sobre el presente expresan lo justo y necesario. Por eso digo que se asientan en las citas que tienen juntas, en como apoyan sus sueños de independencia y empoderamiento, sus necesidades emocionales y sexuales, en como lo dejan todo y viajan en carretera para perderse la una en la otra y desconectar de lo difícil que es ser mujer libre en 1950.
Carol es una mujer muy elegante, con un carisma majestuoso, parece hecha para ser una reina más que para ser una simple mortal que un día fué madre y esposa. Lo que su marido no tolera es que Carol pueda necesitar otras cosas que él no puede darle, u otros besos y caricias que no son los suyos. Por momentos entendemos que Carol ha hecho mucho daño a su marido, primero con su infidelidad con Abby pero él cruza la ralla cuando intenta quitarle la niña cómo castigo por ser libre, feliz, independiente y estar enamorada de Therese.
Therese a veces me recordaba a una niña, no por nada se lleva 16 años con Carol, ella tiene 30 y Carol 45, y esa diferencia de edad se nota en todo, en como viven sus vidas, en lo que esperan hacer de su futuro. Therese quizás por su juventud todavía no ha empezado a luchar por sus sueños, como si el tiempo estuviera parado y solo cuando conoce a Carol el tiempo y la vida se pusieran en movimiento y con ello el deseo de retratar a Carol en cada una de sus fotos, como las musas. Carol tiene la fuerza y el empoderamiento que le ha dado su experiencia vital pero también las cicatrices.
Las dos desde el primer instante se miran de un modo especial, y se mueven en una amistad muy ambigua. Ellas sólo cruzan dos veces esa fina línea que separa sus sentimientos de la amistad al amor y del deseo a la intimidad sexual. Sus primeras citas están enmascaradas bajo la etiqueta de amistad, el más valiente es el novio de Therese, que es quien le dice "estás enamorada de Carol", Therese lo niega y lo niega pero corre a recorrer en coche la navidad con Carol. Y entre la ambigüedad y la bruma del deseo, la noche se hace dueña de sus sentimientos y al final hacen el amor muy, muy, muy explícitamente.
La recta final es lo esperado y no lo que me encantaría, drama y separaciones cuando apenas acababan de empezar, pero en la última escena tienen el beso, el felices para siempre y eso es mejor que un final triste. Lo que aprenden es que por nada del mundo deben renunciar a su identidad. La química entre Cate y Rooney es muy dulce, pero podrían haber hecho más con un guión que se arriesgara y profundizara más (en mi opinión).
Realmente deseaba enamorarme de esta película y por eso no la vi inmediatamente cuando Amazon la subió a Prime Video, es estúpido pero a veces me pasa que tardo mucho en ver algo que realmente deseo por si me decepciona. Y efectivamente me decepcionó pero también me gustó.
Carol la vi con mi madre en la televisión, claro, porque ella también está abierta a ver películas que aplauden el amor sin importar el género, vamos, sin importar la sexualidad. Carol nos habla sobre la homosexualidad y la bisexualidad, pero realmente nunca nos aclara si a Carol y Therese alguna vez les gustaron sus novios/esposos, o si los utilizaron o se acomodaron con ellos, también no olvidemos que en 1950, Nueva York no aplaudía a las mujeres que luchaban por lo que querían, menos a las que amaban a otra mujer, pero para mí esta película tiene vacíos que tendrían que haber llenado.
Es una historia dulce, melancólica y entrañable, que se asienta más en las vivencias y miradas que en los diálogos y pensamientos. Creo que me esperaba una historia de amor con mucha intimidad emocional, con un montón de confesiones de Therese a Carol y de Carol a Therese, y no es así. Me extrañó mucho esa falta de diálogos entre ambas, se enamoran en solo una navidad pero sólo se viven la una a la otra y no desatan todos sus recuerdos para la otra. Mi sensación es que conocieron quien era la otra ahora y quién aspiraban a ser, pero el pasado lo dejaron en ascuas, e incluso sobre el presente expresan lo justo y necesario. Por eso digo que se asientan en las citas que tienen juntas, en como apoyan sus sueños de independencia y empoderamiento, sus necesidades emocionales y sexuales, en como lo dejan todo y viajan en carretera para perderse la una en la otra y desconectar de lo difícil que es ser mujer libre en 1950.
Carol es una mujer muy elegante, con un carisma majestuoso, parece hecha para ser una reina más que para ser una simple mortal que un día fué madre y esposa. Lo que su marido no tolera es que Carol pueda necesitar otras cosas que él no puede darle, u otros besos y caricias que no son los suyos. Por momentos entendemos que Carol ha hecho mucho daño a su marido, primero con su infidelidad con Abby pero él cruza la ralla cuando intenta quitarle la niña cómo castigo por ser libre, feliz, independiente y estar enamorada de Therese.
Therese a veces me recordaba a una niña, no por nada se lleva 16 años con Carol, ella tiene 30 y Carol 45, y esa diferencia de edad se nota en todo, en como viven sus vidas, en lo que esperan hacer de su futuro. Therese quizás por su juventud todavía no ha empezado a luchar por sus sueños, como si el tiempo estuviera parado y solo cuando conoce a Carol el tiempo y la vida se pusieran en movimiento y con ello el deseo de retratar a Carol en cada una de sus fotos, como las musas. Carol tiene la fuerza y el empoderamiento que le ha dado su experiencia vital pero también las cicatrices.
Las dos desde el primer instante se miran de un modo especial, y se mueven en una amistad muy ambigua. Ellas sólo cruzan dos veces esa fina línea que separa sus sentimientos de la amistad al amor y del deseo a la intimidad sexual. Sus primeras citas están enmascaradas bajo la etiqueta de amistad, el más valiente es el novio de Therese, que es quien le dice "estás enamorada de Carol", Therese lo niega y lo niega pero corre a recorrer en coche la navidad con Carol. Y entre la ambigüedad y la bruma del deseo, la noche se hace dueña de sus sentimientos y al final hacen el amor muy, muy, muy explícitamente.
La recta final es lo esperado y no lo que me encantaría, drama y separaciones cuando apenas acababan de empezar, pero en la última escena tienen el beso, el felices para siempre y eso es mejor que un final triste. Lo que aprenden es que por nada del mundo deben renunciar a su identidad. La química entre Cate y Rooney es muy dulce, pero podrían haber hecho más con un guión que se arriesgara y profundizara más (en mi opinión).
🗨 4/10
Pais: Francia
Año: 2016
Diane (Virginie Efira) es una mujer divorciada que todavía espera que el gran amor llegue a su vida. Diane es abogada y tiene un bufete con su ex marido, Bruno (Cédric Kahn), últimamente sus conflictos sobre como llevar la empresa han aumentado, o quizás es sólo que antes Diane se callaba sus propias opiniones y ya está cansada de eso.
Una noche, tras volver a discutir por trabajo con Bruno, se deja el teléfono en la cafetería. Por suerte, Alexandre, que lo ha visto todo, recoge el teléfono y aprovecha para coquetear con ella a través del teléfono. Por alguna extraña razón, a Diane le cae en gracia el extraño y encantador interlocutor, que es arquitecto en Praga y tiene un hijo veinteañero, Benji (Cesar Domboy). Ambos que quedan en una cafetería para recuperar el teléfono y conocerse.
Diane espera completamente ilusionada a su cita, pero cuando lo ve llegar, con sólo un metro treinta y cinco de estatura no sabe dónde meterse o como escapar de la cita. Alexandre (Jean Dujandin) está acostumbrado a la discriminación, al desprecio, a las miradas entre incómodas y espantadas, y siempre lidia con ello con naturalidad y con una sonrisa, se guarda para si mismo el dolor que situaciones como estas o peores, le producen.
Para Alexandre, Diane ha sido un flechazo y no quiere renunciar a la posibilidad que tienen de ser felices, de enamorarse como cualquier otra pareja. Diane, estando al lado de Alexandre, descubre que se arriesga más en la vida, y que cuando está con él es muy feliz pero no soporta que todos la miren por estar con un enano, que murmuren a su espalda o frente a su cara.
Película dirigida por Laurent Tirard, que adapta a la francesa la película Corazón de león de Marcos Carnevale. Película social cuyo único defecto es que no cuenta realmente con un protagonista enano.
Una noche, tras volver a discutir por trabajo con Bruno, se deja el teléfono en la cafetería. Por suerte, Alexandre, que lo ha visto todo, recoge el teléfono y aprovecha para coquetear con ella a través del teléfono. Por alguna extraña razón, a Diane le cae en gracia el extraño y encantador interlocutor, que es arquitecto en Praga y tiene un hijo veinteañero, Benji (Cesar Domboy). Ambos que quedan en una cafetería para recuperar el teléfono y conocerse.
Diane espera completamente ilusionada a su cita, pero cuando lo ve llegar, con sólo un metro treinta y cinco de estatura no sabe dónde meterse o como escapar de la cita. Alexandre (Jean Dujandin) está acostumbrado a la discriminación, al desprecio, a las miradas entre incómodas y espantadas, y siempre lidia con ello con naturalidad y con una sonrisa, se guarda para si mismo el dolor que situaciones como estas o peores, le producen.
Para Alexandre, Diane ha sido un flechazo y no quiere renunciar a la posibilidad que tienen de ser felices, de enamorarse como cualquier otra pareja. Diane, estando al lado de Alexandre, descubre que se arriesga más en la vida, y que cuando está con él es muy feliz pero no soporta que todos la miren por estar con un enano, que murmuren a su espalda o frente a su cara.
Película dirigida por Laurent Tirard, que adapta a la francesa la película Corazón de león de Marcos Carnevale. Película social cuyo único defecto es que no cuenta realmente con un protagonista enano.
Estos días de Navidad apenas he aprovechado para ver películas pero vi en Movistar esta película francesa con mi madre y mi tía Isabel, A mi madre y a mi tía les conmovió. Para mi, el momento más intenso fué cuando vi por sorpresa el cameo de mi amado Geoffrey Couet y él me respondió a los 2 segundos 😍😍 por instagram 😂😂.
Me encanta que si las películas francesas no llegan a nuestros cines al menos lleguen a plataformas como Movistar y Amazon y así las podamos ver, cada vez me estoy aficionando más a ver las películas del país donde mi papá vivió toda su infancia y adolescencia. Tengo la espinita de no saber francés pero al menos puedo ir a Francia mediante el cine.
Un hombre de altura es la típica comedia romántica, sin más. Pero es entretenida, y agridulce. Aprovecha para criticar la discriminación que sufre todo aquel que es diferente, pero precisamente en vez de darle la oportunidad a un actor enano, encoge virtualmente a su protagonista, entonces ellos hablan de derechos y de oportunidades pero no se la dieron a nadie real y eso da rabia. Que sí, que los actores interpretan bien su papel pero creo que el mensaje habría sido más genuino y real si de verdad hubieran dado el papel a quien debían porque es hipócrita decir que se deben dar oportunidades porque estas personas valen mucho y ellos tienen la ocasión perfecta para hacerlo y no lo hacen, creo que me disgustaba mucho eso y me sacaba de la película también porque se nota que lo han encogido con ordenador (malos efectos visuales).
Volviendo a dentro de la historia, mediante el romance entre Diane y Alexandre nos hacen muy conscientes de cómo la sociedad ha alimentado el pánico al que es diferente, por eso Alexandre sufre tanto por el trato y las miradas despectivas del día a día y por eso Diane sufre con la relación, con el sentimiento agobiante de ser mirada y ser juzgada. Realmente es muy triste que la sociedad pueda empañar la felicidad de dos personas, ¿cómo hemos dejado que las miradas y las palabras de unos extraños nos puedan hacer daño o incluso hacernos sentir ridículos?
Alexandre no se quiere tanto a sí mismo como nos jura. Dice que él no tiene miedo, que a él no le duele la discriminación pero sólo nos estaba engañando para hacerse el fuerte y el valiente. Creo que él es un farsante, para Diane interpreta a alguien que se come el mundo día a día con su coraje, la habla de arriesgarse en la vida pero no me le creo y odio como le recrimina a Diane por sentirse llorosa cuando la agobian las críticas. Su actor no me gustó, tenía algo que no me atraía nada. Lo que si me gustó es su relación cálida con el intérprete de su hijo.
Diane todavía no sabe como decir no, cómo ser ella misma sin miedo a lo que los otros le digan, por eso aunque es feliz en la intimidad con Alexandre, también es infeliz. Diane quiere de verdad a Alexandre pero no está preparada para estar con él, ambos tiran día a día bajo un gran farol, el de intentar complacer a otros y no ser ellos mismos. Ella me causa simpatía, porque crece poco a poco y es una chica adorable y divertida. Me encanta Virginie Efira, que es quién la interpreta, cerré el año año 2019 con ella y también lo empecé con ella en 2019 con la emotiva e importante El gran baño.
Me encanta que si las películas francesas no llegan a nuestros cines al menos lleguen a plataformas como Movistar y Amazon y así las podamos ver, cada vez me estoy aficionando más a ver las películas del país donde mi papá vivió toda su infancia y adolescencia. Tengo la espinita de no saber francés pero al menos puedo ir a Francia mediante el cine.
Un hombre de altura es la típica comedia romántica, sin más. Pero es entretenida, y agridulce. Aprovecha para criticar la discriminación que sufre todo aquel que es diferente, pero precisamente en vez de darle la oportunidad a un actor enano, encoge virtualmente a su protagonista, entonces ellos hablan de derechos y de oportunidades pero no se la dieron a nadie real y eso da rabia. Que sí, que los actores interpretan bien su papel pero creo que el mensaje habría sido más genuino y real si de verdad hubieran dado el papel a quien debían porque es hipócrita decir que se deben dar oportunidades porque estas personas valen mucho y ellos tienen la ocasión perfecta para hacerlo y no lo hacen, creo que me disgustaba mucho eso y me sacaba de la película también porque se nota que lo han encogido con ordenador (malos efectos visuales).
Volviendo a dentro de la historia, mediante el romance entre Diane y Alexandre nos hacen muy conscientes de cómo la sociedad ha alimentado el pánico al que es diferente, por eso Alexandre sufre tanto por el trato y las miradas despectivas del día a día y por eso Diane sufre con la relación, con el sentimiento agobiante de ser mirada y ser juzgada. Realmente es muy triste que la sociedad pueda empañar la felicidad de dos personas, ¿cómo hemos dejado que las miradas y las palabras de unos extraños nos puedan hacer daño o incluso hacernos sentir ridículos?
Alexandre no se quiere tanto a sí mismo como nos jura. Dice que él no tiene miedo, que a él no le duele la discriminación pero sólo nos estaba engañando para hacerse el fuerte y el valiente. Creo que él es un farsante, para Diane interpreta a alguien que se come el mundo día a día con su coraje, la habla de arriesgarse en la vida pero no me le creo y odio como le recrimina a Diane por sentirse llorosa cuando la agobian las críticas. Su actor no me gustó, tenía algo que no me atraía nada. Lo que si me gustó es su relación cálida con el intérprete de su hijo.
Diane todavía no sabe como decir no, cómo ser ella misma sin miedo a lo que los otros le digan, por eso aunque es feliz en la intimidad con Alexandre, también es infeliz. Diane quiere de verdad a Alexandre pero no está preparada para estar con él, ambos tiran día a día bajo un gran farol, el de intentar complacer a otros y no ser ellos mismos. Ella me causa simpatía, porque crece poco a poco y es una chica adorable y divertida. Me encanta Virginie Efira, que es quién la interpreta, cerré el año año 2019 con ella y también lo empecé con ella en 2019 con la emotiva e importante El gran baño.
Pais: España
Año: 2016
Jorge ha renunciado a su trabajo por su sentimiento de culpa pero ahora no consigue encontrar otro, vive con su amigo Lucas (Ernesto Sevilla) quién trabaja como guía para sus inquilinos franceses, y tras recibir un "tenemos que hablar" de parte de Nuria, Jorge se cae por el balcón. Nuria cree que Jorge se ha intentado suicidar y por eso decide fingir que su vida tampoco va bien y que aún piensa él, Jorge le da pena y creé que la cercanía hará que le pide el divorcio, para eso sus padres, Patricia (Verónica Forqué) y Miguel (Óscar Ladoire) la ayudarán en la charada.
Película dirigida por David Serrano, co-escribe el guión junto a Diego San José. Supone el reencuentro televisivo de Michelle Jenner y Hugo Silva tras su amor de 6 años (2005-2010) en Los hombres de Paco.
Esta película española también la vi en Amazon, la subieron en noviembre y la apunté en el listado para ver, por un lado porque me encanta ver películas de mi país (aunque no series 😂) y por otro porque yo también me enamoré de Hugo Silva y Michelle Jenner cuando los veía en la maravillosa y divertida serie Los hombres de Paco. Bueno, yo no los shippeé desde el principio porque ella era una niña y él un adulto pero a partir de la segunda o tercera temporada sí (cuando dejé de shippear a la pelirroja con Hugo y la shippee con Aitor Luna y la chica lesbiana 😂), Hugo y Michelle tienen mucha química y naturalidad y fué gracioso porque al final de esta película dicen eso de "nos conocemos de toda la vida" y mi papá dijo "claro, de los hombre de Paco" 😂😂.
Creo que podrían haber aprovechado mejor el reencuentro entre Michelle y Hugo, lo mismo para haberle dado más protagonismo a los secundarios (tendrían que haber ampliado la duración de la película ya de por sí), pero al menos es lo que promete, una comedia con muchas escenas malinterpretables y divertidas, los diálogos, los líos en los que se meten y las interacciones entre Nuria y Jorge, y Jorge y los padres y la secretaria son divertidísimas, es la película que ver si te sientes triste.
Como comedia es muy buena si te gusta que las tramas se vayan liando solas 😂, también tiene de vez en cuando un humor pervertido. Como romance se queda escasa, los personajes se lo pasan muy bien juntos, pero Nuria está fingiendo todo el tiempo y no hay una transición entre la Nuria enamorada de su argentino y la Nuria enamorada de in perdedor simpático como Jorge. Lo único que salva el romance es la natural química entre Hugo y Michelle.
Belén Cuesta vuelve a estar soberbia, su personaje es lo mejor de la película, yo quiero tener una amiga tan motivadora y fangirl como ella, ella es muy fangirl de la gente que aprecia. Verónica Forque también está maravillosa pero no por nada es una gran actriz desde siempre.
El final es lo más absurdo que he visto, está cogido con pinzas, no, lo siguiente. Ese momento para el final feliz no era el momento.
Creo que podrían haber aprovechado mejor el reencuentro entre Michelle y Hugo, lo mismo para haberle dado más protagonismo a los secundarios (tendrían que haber ampliado la duración de la película ya de por sí), pero al menos es lo que promete, una comedia con muchas escenas malinterpretables y divertidas, los diálogos, los líos en los que se meten y las interacciones entre Nuria y Jorge, y Jorge y los padres y la secretaria son divertidísimas, es la película que ver si te sientes triste.
Como comedia es muy buena si te gusta que las tramas se vayan liando solas 😂, también tiene de vez en cuando un humor pervertido. Como romance se queda escasa, los personajes se lo pasan muy bien juntos, pero Nuria está fingiendo todo el tiempo y no hay una transición entre la Nuria enamorada de su argentino y la Nuria enamorada de in perdedor simpático como Jorge. Lo único que salva el romance es la natural química entre Hugo y Michelle.
Belén Cuesta vuelve a estar soberbia, su personaje es lo mejor de la película, yo quiero tener una amiga tan motivadora y fangirl como ella, ella es muy fangirl de la gente que aprecia. Verónica Forque también está maravillosa pero no por nada es una gran actriz desde siempre.
El final es lo más absurdo que he visto, está cogido con pinzas, no, lo siguiente. Ese momento para el final feliz no era el momento.
Pais: Estados Unidos / Gran Bretaña
Año: 2019
Kate (Emilia Clarke) y su familia nacieron en la antigua Yugoslavia, cuando aún existía. Todos ellos se vieron obligados a dejar su país y su futuro para ser inmigrantes en el Reino Unido. Su papá trabaja demasiado para sostener a su familia, con su propio taxi. Su mamá (Emma Thompson) vive con pánico, temen que los ingleses la echen de un país que nunca deja de recordarles a todos que sin importar los años que pasen no serán más que extranjeros. Su hermana Marta (Lydia Leonard) vive con su novia desde hace años pero no sé atreve a llevarla a su casa "como su novia".
Kate cuando vivía en el Reino Unido tenía un brillante futuro en el coro. Su sueño de cantar nunca se acabó pero su voz perdió toda emoción un año atrás, cuando le realizaron un trasplante de corazón. Perder el suyo y sustituirlo por el de un extraño la ha sumido en una depresión, en vez de estar agradecida se siente infeliz por el arranque del que era su corazón. Ella hace de su vida un desastre, yendo de chico en chico, con la maleta a cuestas, sin querer hablar con su amorosa madre.
Todo cambia para Kate cuando allá donde va comienza a encontrarse con Tom (Henry Golding), quién le enseña un nuevo camino en la vida, la incita a realizar pequeñas locuras y despierta a ese corazón que durante un año estuvo dormido. Kate y Tom se enamoran, pero sólo él sabe que es un imposible, él es una cicatriz y un adiós a llorar en navidad.
🎵🎵 "Last Christmas i give you my heart"🎵🎵
La película se inspira en la exitosa canción Last Christmas del grupo Wham! que lideraba George Michael. Emilia Clarke canta en la película, y muestra los tatuajes de dragones que se hizo durante Juego de tronos como un homenaje a su personaje Daenerys Targaryen.
Dirige Paul Feig y cuenta con guión de la actriz Emma Thompson y la dramaturga Bryony Kimmings.
Aprovecharon para estrenar Last Christmas en navidad precisamente para tener más tirón comercial aprovechando el sentimiento de redención y renacimiento de la Navidad, y claro, ese título que viene de la canción que le dedica Kate a Tom le viene como anillo al dedo. Yo la vi con mis padres en el cine (después vi La gran mentira).
Recuerdo que mientras la veía pensaba que era una de las películas más raras que había visto nunca 😂, y en principio no me gustaba porque trataba de chica loca desesperada que sólo complica su vida y la de los demás pero después Tom con su ñoño trabajo de enseñarle a apreciar la vida a Kate me gustó un poquito, aunque tiene muchos agujeros argumentales y cosas incoherentes como hablamos Vero y yo (ella la vió porque no me hizo caso, sabía que ella la iba a odiar), pero mejor hacer ojos ciegos a ellos y quedarse con su mensaje que es que sólo tenemos una vida y que la tenemos que vivir sin tanto llanto, dramas y preocupaciones, porque somos afortunados y libres y tenemos para comer y si tenemos tiempo de autocompadecernos entonces mejor usar ese sentimiento para ayudar a otros. No es que desprecien que alguien tenga depresión o miedos, pero creen que deberían dejar el yo-ismo y visitar más la ayuda al prójimo (algo muy cristiano).
Tiene a las estrellas de moda y eso hace mucho, y pretende ser la nueva Love actually. Aunque yo le encuentro muchas más similitudes y simbolismos en común con "Cuento de navidad" de Dickens. El gran secreto de la película y con el que quieren hacernos llorar es con la revelación sobre Tom pero yo ya sabía que SPOILER Tom estaba muerto y era un fantasma o ángel de la guarda FIN SPOILER desde la segunda escena, se le notaba mucho a Tom que no era un simple chico y otros personajes cuerdos dan pistas sobre ello, como el chico que sirve comidas en el refugio. Tom es el instrumento para que Kate aprecie el corazón que ahora tiene y para que use esa depresión para buscar nuevos sueños y renunciar a los suyos tras haberlos intentado con alegría en su corazón.
Sabía que era un imposible que Tom y Kate pudieran tener un futuro pero era obvio que iban a enamorarse y a querer permanecer en la vida del otro, es conmovedor que SPOILER un corazón tenga el poder de traer la presencia de su antiguo dueño para que Kate aprecie quien se lo dio con su muerte. Obviamente, no hay más que besos porque es raro y difícil tener sexo con un fantasma ¿no? FIN SPOILER Yo no los shippeé pero es que tampoco me enamoré de ellos.
Recuerdo que mientras la veía pensaba que era una de las películas más raras que había visto nunca 😂, y en principio no me gustaba porque trataba de chica loca desesperada que sólo complica su vida y la de los demás pero después Tom con su ñoño trabajo de enseñarle a apreciar la vida a Kate me gustó un poquito, aunque tiene muchos agujeros argumentales y cosas incoherentes como hablamos Vero y yo (ella la vió porque no me hizo caso, sabía que ella la iba a odiar), pero mejor hacer ojos ciegos a ellos y quedarse con su mensaje que es que sólo tenemos una vida y que la tenemos que vivir sin tanto llanto, dramas y preocupaciones, porque somos afortunados y libres y tenemos para comer y si tenemos tiempo de autocompadecernos entonces mejor usar ese sentimiento para ayudar a otros. No es que desprecien que alguien tenga depresión o miedos, pero creen que deberían dejar el yo-ismo y visitar más la ayuda al prójimo (algo muy cristiano).
Tiene a las estrellas de moda y eso hace mucho, y pretende ser la nueva Love actually. Aunque yo le encuentro muchas más similitudes y simbolismos en común con "Cuento de navidad" de Dickens. El gran secreto de la película y con el que quieren hacernos llorar es con la revelación sobre Tom pero yo ya sabía que SPOILER Tom estaba muerto y era un fantasma o ángel de la guarda FIN SPOILER desde la segunda escena, se le notaba mucho a Tom que no era un simple chico y otros personajes cuerdos dan pistas sobre ello, como el chico que sirve comidas en el refugio. Tom es el instrumento para que Kate aprecie el corazón que ahora tiene y para que use esa depresión para buscar nuevos sueños y renunciar a los suyos tras haberlos intentado con alegría en su corazón.
Sabía que era un imposible que Tom y Kate pudieran tener un futuro pero era obvio que iban a enamorarse y a querer permanecer en la vida del otro, es conmovedor que SPOILER un corazón tenga el poder de traer la presencia de su antiguo dueño para que Kate aprecie quien se lo dio con su muerte. Obviamente, no hay más que besos porque es raro y difícil tener sexo con un fantasma ¿no? FIN SPOILER Yo no los shippeé pero es que tampoco me enamoré de ellos.
LOS ACTORES:
Mayu.
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