If I Fix You - Abigail Johnson

Hola, ¿os acordáis que en Julio os conté que me había enamorado de algunas muestras de libros? Este libro fue uno de ellos y no me pude resistir a comprar el ebook incluso si valía 4’74 €. De aquí a Julio han pasado muchos meses, ¿verdad? Tras spoilearme con quien acaba Jill SPOILER Sean FIN SPOILER, leí este libro sin prejuicios. Os aviso de que estoy bloqueada y me ha costado escribir esta reseña, perdonadme 😥.

¿Hay cosas destinadas a estar rotas?

Editorial: Kiwi, 2017.

Original: If i fix you, 2016.

Género: drama, juvenil, romance

Jill tiene 16 años, vive en Arizona y disfruta trabajando con su padre en el taller mecánico. No hay nada que le guste más en el mundo que estar con su padre arreglando coches, excepto salir con su amigo de infancia y amor unilateral Sean. Pero su vida ahora ha perdido su sentido, y todo por culpa, cómo no, de su terrible madre.

Jill y su padre no saben como empezar de cero sin ella, aunque claramente antes vivían un infierno a su lado. Esa mujer nunca les ha querido. Y precisamente ese sentimiento de pérdida, abandono e injusticia es lo que lleva a Jill a sentirse tan atraída por su vecino de 21, Daniel, quien tiene multitud de cicatrices vistosas. ¿Podrá Jill arreglar lo que se ha roto dentro de sí misma y ayudar a los demás, incluso perdonar a Sean?

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Cuando descubrí este libro en verano se me antojaba precioso, sin ninguna duda pensaba que se iba a convertir en uno de mis favoritos. Y no ha pasado, pero aún así estoy contenta porque ¡ha logrado gustarme! Para mi no es una tontería porque mis 3 últimos libros han sido un completo desastre, y tenía que llegar éste para hacerme sentir bien, para recordarme que soy una chica que ama viajar dentro de un libro. No puedo decir que If I Fix You haya sido memorable, pero a veces soy muy dura con las historias y en este caso era más cosa de que no me gustan los triángulos amorosos. ¡Culpa mía pues yo elegí leer el libro! A vosotros, lectores, os animo a darle una oportunidad pues es una historia diferente y yo no me arrepiento de haberme aventurado con Jill, su maravilloso papá, Daniel, y Sean.

Este libro ha durado poquísimo en mis manos -en mi app kindle-, lo empecé el sábado de madrugada porque me sentía triste y llena de ansiedad, y cuando quise darme cuenta eran las cinco de la madrugada y llevaba dos horas leyendo. Y hoy tampoco quería dejar de leer, estaba totalmente enganchada por el modo tan precioso y significativo de escribir de Abigail Johnson.

Me habría encantado enamorarme de ésta novela porque me habría hecho mirar con otros ojos cada escena y a cada personaje, pero no pasó. Simplemente pasé un rato intenso y entretenido a su lado, horas en las que solo existió Jill y su propio mundo.

If I Fix You es una historia profunda, con muchas reflexiones en las que Jill nos abre su mente y su corazón. Cuando ella se derrumba, nosotros lo sentimos en el pecho, y cuando es feliz o mínimo disfruta de un buen día, también sentimos un calorcito agradable. Es uno de esos libros que consiguen atraparte dentro de sus vivencias, pensamientos, sentimientos, y reflexiones.

Jill me gustó. Es una protagonista con la que conecté desde el primer segundo. No entra dentro de mis personajes favoritos ni nada, pero si que me gustó mucho, y todo lo que ella sentía lo sentí yo como mío. Jill me hizo sobreempatizar con ella, aunque debo admitir que no siempre la entendí. Es una buena chica y siempre la sentí real, eso es lo que más destaca en ella, lo viva que está.

Jill está sufriendo muchísimo y es doloroso y precioso al mismo tiempo estar en su mente. Yo creo que ella está completamente rota pero nunca deja de buscar curarse. No se entrega al odio o a la rabia durante mucho tiempo, cosa que me encanta pues bastante daño le han hecho ya otros. Me encanta como Jill tiene carácter en los momentos que importan. Ella está buscándose a sí misma, indagando en cómo reparar su corazón hecho añicos y los profundos sentimientos que tiene de traición, desarraigo, desesperación. Jill aprende mucho durante el libro y aunque trastabillea y mete la pata, siempre se esfuerza en el perdón y en la autosuperación.

Escena con su papá

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Otro detalle que me gustó mucho es la pasión de Jill por los coches, lo feliz que es en ese mundo, el entusiasmo que la embarga cuando se pierde en su trabajo soñado. Disfruté como una niña de los recuerdos del taller con su papá. Y ese detalle, la relación con su padre fue un lujo como espectadora, me encantó ver ese aspecto que define quién es Jill pues ambos se quieren con locura.

Jill no soporta a su madre, y a mi no me extraña porque es una mujer horrible que lo único que busca es hacer daño a su propia hija. Lo mismo pasa con Daniel, el vecino, quien tiene unos padres que son un infierno, algo que daría auténtico miedo.

Daniel es el vecino de al lado, y no es ningún estereotipo aunque lo parezca. Daniel es un trocito de pan, que nunca ha recibido ni un poco de amor. Él lo único que conoce es el abuso y el maltrato. Daniel lleva toda su vida luchando por abrir los ojos de su madre, y aún así es como el malo del cuento. Su madre permite que desde niño le maltraten, incluso le desea la muerte, ¡y él la sigue queriendo! Daniel es un chico que ama incondicionalmente y por eso es tan vulnerable con Jill.

Ambos se sienten atraídos porque tienen el corazón roto. Se ven a sí mismos como un reflejo, niños heridos y despreciados por sus mamás. Juntos pueden escapar de la realidad y mirar las estrellas desde el tejado de Jill. La atracción siempre está ahí. Jill está dispuesta a quererle y Daniel queda cautivado por ella, ambos son refugio y calma para la pena del otro.

YO CREO QUE LA AUTORA NO SUPO FINALIZAR SU RELACIÓN. Para ello usó 2 excusas que me parecieron tontisimas: la diferencia de edad y el beso de borracho que Daniel le dio a Jill. La autora es bastante dramática a lo tonto y usa patéticas cosas para “terminar su romance imposible”, que de imposible no vi mucho.

Sean también es un trocito de pan aunque sea lento en asuntos de amor. Yo creo que él se merece una gran disculpa porque muchas lectoras y la propia Jill le han odiado un poco y la verdad es que no se lo merece para nada. Sean es la prueba de que a los 15-16 todavía se es un niño y defenderse es difícil. Sean es divertido, natural, y un coqueto pero en un sentido sano, aunque es Jill quien recibe sus flirteos de corazón pues es ella la chica de la que está enamorado desde niño.

El malentendido entre Jill y Sean se podría haber arreglado con UNA conversación y Abigail Johnson no permite eso para tener bucle y bucle durante la novela, con lo que Jill intenta perdonar a Sean por algo que no tiene la culpa, y a la larga la sensación es de haber tenido un romance de infancia totalmente desaprovechado, cosa que me cabreó totalmente.

Jill y Sean eran bonitos, muy íntimos, y llenos de nostalgia. Sean trata de un modo muy dulce a Jill, siempre esforzándose por estar a su lado ¡sin entender porque ella no soporta verle a veces!

La novela no se centra en el romance, es mucho más que eso. Pero dejaré que lo descubráis por vosotros mismos 😘.

ABIGAIL JOHNSON

Lo mejor de If i fix you es la pluma de ésta mujer. Me ha enamorado su modo de escribir. Su narrativa es preciosa, sentida, sentimental, profunda, reflexiva, y muy ligera, y el humor de Jill es ácido e irónico, con lo que diálogos y narrativa son un placer como lectora. Sin ninguna duda es el punto más fuerte de la novela. Es como si todo estuviera vivo dentro de If I Fix You 💔.

Aclaro que este libro SÓLO tiene algunos besitos 👄.

Mayu.